Por mucho que pasen los años y que la tecnología avance, muchos seguirán pensando que para calentarse bien en invierno y pasar las horas de la siesta calentito como nadie, no hay nada como un brasero. La única pega que le ponen algunos es su capacidad adictiva, lo cual nos hace aspirar a poder comprar braseros de bajo consumo que nos permitan usarlos durante más y más tiempo, sin ningún tipo de remordimiento.
Si tú también eres uno de los convictos adeptos a este aparato de calefacción en cierto modo con unas connotaciones entrañables, en esta página te vamos a mostrar algunos braseros eléctricos de bajo consumo, capaces de hacerte disfrutar del calor «atrapado» bajo la mesa y la falda camilla como siempre has hecho, pero con un consumo más moderado.
Braseros de bajo consumo: Índice
Qué entendemos por brasero de bajo consumo
Los braseros ya sabes lo que son. Su nombre nos habla de su origen, al tratarse de una especie de soportes metálicos circulares de brasas incandescentes (que podíamos hacer en el patio de casa, si lo teníamos, o que podíamos comprar directamente al piconero), que se colocaban en la estancia principal bajo la mesa, obligándonos a mantener siempre una rendija de la ventana abierta. En ese aspecto, un brasero eléctrico de bajo consumo poco tiene que ver con uno de aquellos braseros originales, salvo en la forma.
Los braseros para mesas camilla de bajo consumo son, siempre, aparatos eléctricos dotados con resistencias, que podemos usar, por tanto, sin necesidad de mantener una entrada de aire en la estancia (pues carecen de elementos de combustión), y que, como elemento de regulación de consumo, lo que hacen es incluir hasta cuatro posiciones de potencia (dos de las cuales se encuentran por debajo de la media de este tipo de dispositivos) que nos permiten regular el calor emitido en vez de encender y apagar, pues ya sabemos que el encendido es, en cualquier aparato eléctrico, el factor de consumo más alto. En relación con la más baja potencia, nos vamos a encontrar con lo que algunas marcas han dado en llamar calor negro. Lo veremos a continuación.
Por tanto, en principio, no es que cuente con una tecnología alternativa a las clásicas resistencias como la tecnología infrarroja, por ejemplo; un brasero de bajo consumo es un brasero que nos permite gastar menos, haciendo uso de los mismos principios técnicos básicos, pero con un plus de refinamiento en su diseño y fabricación.
Braseros de bajo consumo MAVE
En el segmento de los braseros de bajo consumo son dos las marcas que nos vamos a encontrar más asiduamente en las tiendas. Una de ellas es Mave, y la otra la conoceremos más adelante. De Mave nos encontramos con las primeras alusiones comerciales a los braseros de calor negro, algo que nos puede hacer extrañarnos en un principio, pero no esconde ningún sistema tecnológico alternativo en realidad.
Como indicábamos antes, los braseros eléctricos de bajo consumo de calor negro son modelos con varios niveles de potencia, el más bajo de los cuales es capaz de emitir calor sin llegar a poner las resistencias al rojo vivo y sin, emitir, por tanto, incandescencia alguna. Por regla general, los braseros Mave de bajo consumo cuentan con cuatro posiciones de potencia: 250, 500, 700 y 900 vatios, siendo la de 250 vatios la que se corresponde, concretamente, con el famoso calor negro del brasero.
A diferencia de los braseros de luz, con resistencias incandescentes, los braseros de calor negro cuentan con una resistencia que, sin llegar a la incandescencia, sin llegar a emitir luz, son capaces de emitir el calor suficiente para calentarnos los pies y las piernas en una típica mesa con camilla. El calor negro es, por tanto, simple y llanamente, un calor no incandescente.
Lo que no podemos decir es que existan braseros convencionales capaces de emitir un calor equivalente a 900 vatios con la mitad de potencia. La idea de brasero de luz de bajo consumo, por tanto, no es totalmente cierta. No obstante, si tenemos la posibilidad de seleccionar una potencia baja de entre 400 y 500 vatios, sin dejar escapar ese calor con el uso de una falda camilla, conseguiremos un ambiente térmico muy agradable sin necesidad de encender y apagar resistencias, y haciendo un consumo moderado. Con luz o sin luz, pero moderado.
Braseros de bajo consumo FM
La otra marca a la que estamos obligados a mencionar es FM, una compañía española que desde su fábrica en Lucena (Córdoba), lleva desde los años 70 del pasado siglo XX produciendo sistemas de calefacción para hogares, ventiladores, pequeños electrodomésticos, hornos de panadería industriales, etc. Hoy en día, FM no sólo vende braseros eléctricos de bajo consumo en España, sino que también exporta a muchos países del extranjero.
La marca ostenta el «título» de ser la primera en distribuir un modelo de brasero de resistencias, razón por la cual hoy en día es, también, referente en el mercado de braseros de bajo consumo.
No obstante, en su particular interpretación del bajo consumo, FM no llega ni mucho menos a los niveles de Mave, quedándose en los 700 vatios de potencia fija.
Cómo colocar un brasero eléctrico de bajo consumo
Para poder hablar de bajo consumo en un brasero eléctrico, aparte de partir de un aparato de bajo requerimiento eléctrico, tenemos que contar con una eficiente utilización del calor generado. Y para eso, es necesario que el brasero eléctrico sea colocado de la forma correcta, en el lugar adecuado.
Un francés, un alemán o un americano, por ejemplo, podrían colocar un brasero eléctrico en medio de la cocina, del salón o del baño, tal cual, a la vista, y quedarse tan panchos. Pero es complicado que un español cometa un error así. Las mesas de camilla han sido, y son, un clásico en el «paisaje» doméstico de muchos hogares, el punto de encuentro en invierno para evadirse de los fríos, para ver la tele, para leer, para entrar en conversación de la forma más agradable y confortable.
Un brasero de bajo consumo parte de un uso inferior de potencia, de manera que tenemos que ser aún más exhaustivos con este principio, o echaremos a perder el calor emitido. Por tanto, para colocar un brasero eléctrico de bajo consumo necesitaremos, en primer lugar, una mesa con tarima para brasero, que pueden ser circulares (las más típicas) o rectangulares. El brasero irá encajado en el agujero de la tarima, a ser posible sin tocar el suelo.
Sobre ésta, para poder «atrapar» ese calor, tenemos que colocar una falda para mesa camilla de la forma y el tamaño adecuado. Con esta estructura, conseguiremos crear una sauna de calor en la que, con una potencia razonablemente baja, podremos sentirnos muy a gusto durante horas, sin llegar a calentar el ambiente exterior, pero sin consumir tanto como con una estufa u otros sistemas de calefacción convencionales.
Braseros de bajo consumo de colgar
Una alternativa al uso de tarima, con la que tendremos, eso sí, que seguir usando un sistema de retención a través de falda camilla, es el de los loritos o braseros de colgar de bajo consumo. Éstos se pueden colgar con un gancho en el bajo de la mesa camilla, y con potencias bajas de en torno a los 400 vatios, consiguen también efectos bastante placenteros.
Lo ideal siempre es colocar los braseros de bajo consumo en la parte más baja posible, pues el calor asciende y se concentra en las partes superiores, pero si no tenemos tarima y queremos un brasero de camilla, ésta es una buena opción.
Dónde comprar braseros de bajo consumo
Los braseros de consumo bajo se pueden comprar en muchos sitios en España. En un principio, nos encontramos con dos opciones: tienda física o tienda online. Si apostamos por la primera opción, destaca la oferta y la demanda, también, de braseros de bajo consumo en Carrefour, algunos de los cuales son de la marca FM citada. Pero en otros grandes centros como Leroy Merlin o en pequeñas ferreterías y tiendas de barrio, también encontraremos este tipo de sistemas.
En la opción online, los braseros de bajo consumo Amazon son, sin duda, los más requeridos en España.
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